Armas de asocial.

Conjunciones Copulativas.

No soporto el calor, ni a los tontos, ni a mi jefe, ni el trabajo, ni las largas esperas, ni la gente con voz chillona, ni los perfumes dulzones, ni a la gente a la que le huele el sobaco, ni a l@s pesad@s, ni esta isla asquerosa, ni el acento de muchos de los que me rodean, ni a la "barbi" garrula de la Munar (ésa a la que se le pudren los visones, como muy bien dice R. P.).... En fin, que espero que se acabe pronto el maldito verano. Me pone de mal humor.

Dolce vita.

Historia "Basura".

Últimamente ando remisa con la escritura en éste, mi humilde espacio. La cuestión es que he encontrado un entretenimiento que me tiene enganchada. Mucho mejor que la "telebasura" y la "prensa rosa" Se trata de lo que yo llamo la "Historiabasura" (que también la hay, y no sabía yo que era tan divertida). Me estoy leyendo las cartas manuscritas de la realeza de hace siglo y medio y me lo estoy pasando pipa. Ahora estoy casi llegando a ver cómo resuelven epistolarmente el famoso duelo (el padre de todos los duelos), en el que el pretendiente al trono le descerraja un tiro a su cuñado (¿por cuestiones políticas o por llamar "maricón" al hermanísimo?), también de rancia estirpe; y lo deja seco. Además, de paso, cotilleo las faltas de ortografía de los poderes fácticos de entonces. Lo dicho, me disculparéis si ando entre cartas y legajos, pero esto engancha un montón.

Con Houellebecq como guía.

Destinos Turísticos Extravagantes.

Para elegir vacaciones, este año, acabo de tirar a la papelera todos los folletos de agencias que tienen palabras en común.

La parte del león.

Romance De Lobos.

Tres, dos, uno... Y veremos quién se lleva la mejor parte.

Disciplina inglesa.

Lo Increíble.

Pensaba que en lo tocante al mundo laboral, lo había visto todo. Me equivocaba. Siempre me quejo de los bastardos con los que trabajo, y he aquí un ejemplo de su "bastardía": Ahora se dedican a castigar a los estudiantes que se traen de la Pérfida Albión, para sacarse unos pocos euros en el verano. Los explotan salvajemente, haciendo jornadas de cincuenta horas semanales, día y noche; y cuando algo no les gusta de esos pobres chicos, los mantienen encerrados, durante todo el día, sin salir, ni siquiera a comer y sin que nadie les dirija la palabra. Es humillante. Pero las protestas no sirven de nada, a esos pobres chicos les hacen firmar unos contratos leoninos que en nuestro país son ilegales (pero en el reino de Su Graciosa Majestad les encantan a los empresarios y son legales) como si fuesen esclavos de plantaciones (porque aunque nadie lo crea, estos "hijoputas" no se han curado de su "colonialismo"). De esto a que empiecen a pegarles o a castigarles de rodillas con dos pesados libros en la mano, hay un paso...

Impedimentos.

Y Que Lo Intenten.

Lo mismo el mazo se lleva una sorpresa...

Hoy...

Sólo El Viernes Puede Animar.

Y las esquelas del periódico cuando ves el nombre de un enemigo bajo la crucecita negra, y piensas: uno menos.

¿Quién se ha comido mi seta venenosa?

Lo Que Se Va...

...Por lo que se viene.

Crítica de la razón pura.

El Juego De Las Apariencias.

Al final, en conclusión, todos aparentan lo que no son... aunque ninguno lo entiende.

Al alcance de la mano.

Lugar Común.

Se me hace extraño ser dueña de tiempo y espacio. Es como tocar el paraíso.

De genios, figuras y sepulturas.

A Desempolvar.

Ahora puedo sacar toda la filmografía de mi Tarantino y hacerme una maratón "dvdescerebrada" de fin de semana para desintoxicarme de libros.

Game over (por el momento).

Jaque Mate.

Y ya se acaba la disfunción de los exámenes. Sólo cuarenta y ocho horas y Burkina Faso y Myanmar, me separan de poder volver a leer tebeos (al menos hasta septiembre, en el peor de los casos), que es lo que más me mola.

El Arca de Babel.

Consideraciones Sobre El Diluvio.

Quizá hoy no sea tarde. Mañana, a buen seguro, lo será: ¿Para qué molestarse?...

Auctoritas.

Ellas Son Así.

La prudente y decente que se escondía para llamar, entre guardia y novia. La que era perfecta, feminista, culta, políticamente correcta, la "más mejor" dando consejos y suspirando en secreto por niñas de escuela corta y cabello largo. La que se escondía detrás de la felicidad para vivir a remolque de un tipo asqueroso, gorrón e impresentable. La idiota que se creía Malú y me destrozaba los oídos con notas desafinadas. La que se escondía bajo la toga la putrefacción de sus pasiones masoquistas. Ladrillos de un pasado que no añoro. Maniquíes en el escaparate de una lujosa tienda de carroña femenina. No sólo son bastardos los hombres. Ite missa est.